30 enero 2009

LA ALPUJARRA, OTRO MUNDO


Es la Alpujarra una comarca a mitad de camino entre Granada y Almería, si la vemos de Este a Oeste y entre la costa y las alturas, si la vemos de Sur a Norte.

Situada en la falda (como si fuese una madre) sur de Sierra Nevada, en la zona de solana de estas montañas, como diríamos por Andalucía.

Para mí, cada vez que voy entro en un mundo diferente donde el tiempo se detiene y la naturaleza está íntimamente ligada con las mujeres y hombres que la habitan en simbiosis infinita.

Su historia es antigua y compleja ya que, como en casi toda España, y más en el Sur, la mezcla de culturas ha sido siempre su seña de identidad. Fenicios, Griegos, Romanos, Visigodos, Moros, Castellanos, Gallegos y Guiris... en la actualidad, donde todas las culturas han dejado un poquito de su idiosincracia y probablemente restos importantes pero inapreciables. Pero la muestra más fehaciente de la herencia de todas estas invasiones quizás sea el espíritu abierto de sus gentes amables y hospitalarias.

En realidad, hay muchas direccionesde interés en las que se pueden leer cosas interesantes sobre esta extraordinaria comarca y que se pueden consultar más abajo.

Para mi lo importante es ser capaz de trasnsmitir el sentimiento que me causa la visita de sus tierras, sus pueblos y sus gentes a través de este artículo, si bien creo imposible tamaña proeza en tan poco espacio... no obstante intentaremos algo. Aunque sea sólo escribir éste prólogo para que el libro lo leais "in situ" poniendo los pies en el mismo (es decir, sobre el terreno).

A mí, de vez en cuando me apetece pasear por Las Alpujarras para empaparme de su aire, su espiritu, sus leyendas, sus sabores y sus olores...


Hay multitud de pueblos y cortijos diseminados por la falsa sur de Sierra Nevada que componen esta extraordinaria comarca a la vez granadina y almeriense. Su orientación hacia el sur y hacia
el sol, creo que es lo que le da un carácter abierto y acogedor, a pesar de que el invierno la recorra con sus fríos gélidos y sus nieves.

Da igual la época en la que se visite. Siempre es un lugar cálido y acogedor, por sus gentes y por sus pendientes tierras organizadas en bancales. El agua de las cumbres fluye por sus barrancos y sus acequias regando sus bosques y sus arroyos verticales (algunos bermejos por sus minerales), escondidos entre las rocas, forman su banda sonora.


Recuerdo cuando acompañaba a mi hermana mayor, la maestra, a su destino, hace muchos años, allá en los confines de Los Bérchules, donde debía de cumplir con su grato placer de enseñar a los niños perdidos en esas montañas. Eran tiempos difíciles, cuando llegar allí se convertía en una auténtica aventura de varias horas.

La gente que encontré entonces, niños de mi edad, no debían de ser demasiado diferentes de los que conocía en mi barrio de Santo Domingo, en Granada, pero si recuerdo su cariño y su amistad.

Pues la verdad es que dejaron en mí un recuerdo imborrable para el resto de mi vida. De vez en cuando vuelvo y me encuentro que aquellas lejanas tierras que ahora no lo son tanto, aunque debo reconocer que curvas si que las hay para recorrer toda la alpujarra (la verdad es que hay muchas rectas, pero son muy cortitas... lo que significa que abundan las curvas ;-) ).

Mi recomendación es, si se quiere disfrutar de esta maravillosa comarca, recorrerla siguiendo la siguiente ruta:


  • 1er día: Granada, Lanjarón, Capileira:
Visitando Lanjarón y su balneario. Merecería la pena un día d edescanso en dicho paraje, sólo por disfrutar de sus aguas mineromedicinales.

El Barranco del Poqueira, con sus tres perlas, Pampaneira, Bubión y Capileira, merecen un día completo para visitarlos. La noche es extraordinaria pues todo cambia y es como otro lugar mágico. Cada hora del día y cada día del año nos presenta el mismo lugar como diferente. Invierno, verano, Otoño o Primavera son épocas en las que la belleza tiene colores diferentes en cada lugar.

La posibilidad de ascender a las cumbres más altas de la península (el Mulhacén con sus ), el paseo por la Tahá de Pitres (que requiere de un día completo andando por senderos intrincados) o simplemente el paseo por las callejuelas de cada uno de estos pueblos que nos enamoran con sus laberintos, sus tinaos, sus macetas, sus gentes, su cocina...

  • 2º día: Capileira, Trevélez, Válor:
Pórtugos, con su fuente agrilla, Pitres con su Puerto de Mar (el más alto del mundo) o el resto de los pueblos y el paisaje de la carretera, algo más abierto que el de el día anterior pero con su propia belleza.
(La foto de la cena corresponde a Capileira. Aunque una pizza no sea muy típica de la Alpujarra, el exquisito plato alpujarreño o unas migas quizás sean un poco fuertes como cena...)
  • 3er día: Válor, Puerto de la Ragua, La Calahorra, Guadix, Granada:
El fresco del puerto de la Ragua, a unos 2.000 m de altitud, y paso a la zona norte de Sierra Nevada con vistas impresionantes sobre el Altiplano. Al fondo la Sierra de Baza.
La Calahorra con su imponente castillo. Y finalmente Guadix, con sus cuevas, su alcazaba, o su hermosa catedral.

Aunque la ruta se puede hacer en un día, tres serían un disfrute y me quedo corto. Cada uno de los días con parada en los maravillosos pueblos con los que nos encontramos y sólo he nombrado algunos de los muchos que abundan, y todos dignos de pasear y disfrutar.

Por tanto, vaya aquí un pequeño apunte de lo que esconde esa cmarca y que sirva para convencer al que lea este humilde artículo de lo que se puede encontrar en estas tierras.

Direcciones de interés:
Mapa en Google Map.
Fotos errece en Panoramio
Más fotos de Panoramio
Post en Google Earth.
La Alpujarra en la Wikipedia
Más información sobre la Alpujarra
Historia de la Alpujarra
La Alpujarra
La Alpujarra monumental
Gerald Brenan, hijo ilustre de la Alpujarra
Aben Humeya, un alpujarreño ilustre
Bien venidos a Nieles

Bibliografía:

Página de Nieles, muy interesante en cuanto a Bibliografía.
Más bibliografía